STAFF SOL YUCATÁN
NACIONALES.- El año pasado el país perdió 321.000 hectáreas de bosque, que incluye explotación ilegal, crimen organizado, aumento de terrenos para monocultivos y ganadería, el turismo e incendios forestales.
Desde 2001 se han arrasado casi cuatro millones de hectáreas, lo que equivale una extensión territorial casi igual a la de una nación como Portugal. Los datos son de Global Forest Watch, una plataforma que monitorea la situación de los bosques en el mundo, y coinciden con los de organismos ambientalistas mexicanos, que lanzan una alerta sobre el impacto de esta destrucción.